Una chica te pide que le ayudes en el gimnasio y…
QUe una chica te pida que le ayudes en un gimnasio puede ser, posiblemente equivalente a una mamada a nuestro ego, sobre todo cuanto mas tonto seas. Piensas… me lo pide a mi por que le gusto, por que ha visto que controlo, por que estoy fuerte, y tu ego engorda hasta magnitudes impensables. Hasta ahí todo correcto, pero… ¿y si la chica tiene una manera de «sufrir» un tanto extraña?