Meando en el ascensor
Las hay muy guarras, está claro que a todos alguna vez nos han entrado ganas de mear y aveces no podemos contenernos, pero hombre, ponerse las dos al mismo tiempo, y en un ascensor… Suena un poco a cachondeo.
Por suerte había una cámara de seguridad para captar el momento y pillarlas infragantis mientras echaban la meadita.