Un tetraplégico mueve un el cursor de un PC con la mente
Un joven tetrapléjico al que se implantó un nuevo sensor en el cerebro ha sido capaz de mover un cursor de ordenador
Puede abrir un correo electrónico y controlar un dispositivo robótico con simplemente pensar en hacerlo, dijo el miércoles un equipo de científicos.
Los investigadores creen que el sensor BrainGate, que cuenta con electrodos implantados en el cerebro, podría ofrecer una nueva esperanza para personas paralizadas por lesiones o enfermedades.
«Este es el primer paso de un ensayo clínico en marcha de un dispositivo que es alentador por su potencial para ayudar a personas con parálisis», señaló en una entrevista el doctor Leigh Hochberg, del Hospital General de Massachusetts.
El hombre de 25 años, que sufrió una parálisis de sus cuatro extremidades tres años atrás, completó tareas como el movimiento del cursor en una pantalla y el control de un brazo robótico.
El joven es el primero de cuatro pacientes con lesiones en la espina dorsal, distrofia muscular, apoplejía o una enfermedad neuromotriz que están probando el sistema del cerebro al movimiento desarrollado por la empresa Cyberkinetics Neurotechnology Systems en Masschusetts.
«Este es el comienzo de una gran neurotecnología en la que la habilidad para enviar señales fuera del cerebro ha dado un gran paso hacia adelante (…) Creo que esto representa un suceso histórico», declaró el profesor John Donoghue, de la Universidad de Brown en Rhode Island y jefe científico de la empresa Cyberkinetics.
Los científicos implantaron un pequeño chip de silicio con 100 electrodos en el área del cerebro responsable del movimiento. La actividad de las células fue grabada y enviada a un ordenador que tradujo los comandos y permitió mover al paciente y controlar un dispositivo externo.
«Esta parte del cerebro, la corteza motriz, que habitualmente envía sus señales a la espina dorsal y luego a las extremidades para controlar el movimiento, aún puede ser utilizada por este participante para controlar un dispositivo externo, incluso años después de su lesión en la espina dorsal», agregó Hochberg, coautor del estudio publicado en la revista Nature.
Aunque no es la primera vez que la actividad cerebral ha sido utilizada para controlar un cursor, Stephen Scott de la Universidad de Queen en Ontario, Canadá, afirmó que estos logros producen avances en la tecnología.
«Esta investigación sugiere que las prótesis implantadas son una estrategia viable para ayudar a individuos gravemente paralizados para comunicarse e interactuar con el entorno», destacó en un comentario en la publicación científica.
En un estudio separado, investigadores de la Escuela de Medicina e Ingeniería de la Universidad de Stanford describieron una manera más rápida para procesar señales del cerebro para controlar un ordenador o una prótesis.
«Nuestra investigación está comenzando a demostrar que, desde una perspectiva de funcionamiento, este tipo de sistema protésico es clínicamente viable», indicó en un comunicado Stephen Ryu, profesor asistente de neurocirugía en Stanford.